EL LUCHADOR me desperté, tras una siesta de 15 minutos, recuperado y en forma abrí los ojos y obtuve ese placer, ya sabes, cuando piensas: mi vida funciona luego cobré conciencia de la realidad: durante la última semana me habían despedido de mi trabajo y a mi madre le habían diagnosticado un cáncer de mama casi me hundo al recordarlo y entonces hice lo que tú o aquel o cualquiera hubiese hecho: me incorporé de la cama listo para seguir luchando. José Ángel Barrueco,Para estas noches de insomnio, Colección Zigurat, 2010
BUENO EL JAB, BUENO
ResponderEliminarESTOY CON TU LIBRO, JORGE
UN ABRAZO
KEBRAN