obra de Carlos Leiro
Diatriba contra un hombre sentado
Jun15
2011-No, no me vengas con tus cascadas de miedos repentinos. Ni con tu indecisión ocultando cobardía. No me vengas con preguntas que no quieren respuestas. Ni con el argumento de brazos cansados de tanto remo. No vengas con pasos lentos que se jactan de seguros, ni con seguridades que bien podrían ser equilibristas de bajo rendimiento. No, no me vengas con tu postura decorosa describiendo qué es correcto y que no. No me vengas con puntos suspensivos, cuando bien vendría un punto
y aparte
no me vengas con que te molestan mis palabras porque a mí, me agota la nulidad de tus acciones.-
Él contestó: -yo, no lo podría haber dicho mejor- Y se acomodó en la silla.
Claudia Waingan
Jajajaja! no se puede nadar contra la corriente ni pedirle peras al olmo...
ResponderEliminar(me cae muy bien Claudia)
Gracias por acercárnosla.